-¿Sabes
una cosa? Si nos quedasen tan solo diez segundos te diría que saliésemos juntos
por la puerta. Si nos quedase todo por delante te diría que salieses tú… Y si
fuésemos inm…
-Ni
siquiera sabemos si se puede abrir la puerta- le mira, y antes de seguir sonríe-
Miras como si te hubieran estallado las pupilas.
-
Solo te estoy mirando.
Sonrisas
tontas, cada vez más reales. Miradas que no se aguantan.
-Imagina
que solo puedes decir una cosa más. Y después callar para siempre.
-¿Tú
qué dirías?
-Yo
he preguntado primero.
-Quizás
solo esperaría aquí sentado, contigo, hasta que realmente me estallasen las
pupilas.
O… hasta que escuchase cómo se… quiebran… mis costillas.
Alegría
sin fuerzas. Tedio.
-Dirías
algo.
Tripas
que se retuercen esquizofrénicas.
-Solo
podría pensar en eso justo antes de morir. Entonces… diría: ¿…vienes?
Sonrisas
tontas, cada vez más reales. Miradas que no se aguantan.
-¿Y
si fuésemos inmortales?
-Entonces
desearía que nuestra inmortalidad durase tan solo diez segundos.